miércoles, 16 de febrero de 2011

Chocolate...

Llevo toda la mañana escuchando en la oficina la cantidad exagerada de bombones que le han regalado a todas mis compañeras. Como yo no creo en San Corte Inglés, (ni lo celebro), no me han regalado nada (ni quiero, no me tengáis pena), así que, después de tanto escuchar hablar de bombones, cuando, por fin, he conseguido llegar a casa he llegado muerta por comer chocolate.
Es mi placer más confesable, lo admito, me encanta meterme en la boca un poco e ir chupándolo, dándole placer a mis papilas gustativas, hasta que se me deshace dentro y voy a por más.
Así que he atracado la cocina y me he llevado un puñado de bombones, de esos que tienen licor dentro y una guinda, a la habitación para comerlos mientras me cambiaba de ropa.
Aún no he terminado de llegar a la habitación cuando ha entrado mi chico en casa. Entra y como es otro caprichoso, tan pronto ha visto los bombones le ha faltado tiempo. Pero él es más rápido, los mastica. Entonces se ha acercado y me ha saludado. Uf! con las ganas que tenía de chocolate y su boca sabe a chocolate, del negro que, mezclado con el licor, tiene ese gusto intenso y el dulzor de la guinda... os mentiría si dijera que no he saboreado con mi lengua cada rincón de su boca en busca del sabor a cacao, mejor aun que comer el bombón, beberlo de su boca.
No he podido resistirlo, quizá haya sido el deseo del chocolate y lamer en su lengua el bombón, ha sido automático, me he excitado tanto que lo he desnudado. Soy golosa para todo y tenía ante mí los dos mayores placeres, chocolate y la polla de mi chico, mezclados son la bomba.
He destapado un bombón, he mordido un poco de chocolate y me la he metido en la boca, con ese placer que da hacer algo que no esperas, gota a gota he derramado el licor mientras lo lamía para beberlo, hasta que solo ha quedado la guinda. Una y otra vez mi lengua ha dado buena cuenta de su erección, disfrutando hasta la garganta de la dureza de su miembro, de pie, en medio del cuarto, chupando su polla mientras que, agachada, me masturbaba despacio, porque, de lo contrario hubiera llegado mucho antes que él.
Entonces, cuando ya me he olvidado de los bombones y más concentrada estaba en chupar todo cuanto tenía ante mí, ha empezado a correrse. El sabor de su semen ha provocado que me corriera casi al instante, un intenso orgasmo que me ha hecho gritar de placer mientras se llenaba mi boca.
Y todo por un bombón! todo por el sabor orgásmico del chocolate... para que luego digan que no tienen razón los del anuncio cuando dicen que es un placer adulto...

3 comentarios:

  1. ¿ Véis por qué le compro chocolate ?

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  2. No he visto el anuncio pero supongo que (corrección política mediante) dicen adultos por no decir viejos. Yo andaba preocupado porque a medida que pasan los años me va gustando más el chocolate. Mi temor es que fuera un sustituto del sexo pero por vuestra historia, veo que son compatibles.
    Bss x-kolatados

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  3. J, lo mejor es comer chocolate con placer, bien sea sexual o cualquier otro, pero no hay que sustituir el sexo por nada, creo que es lo único que me gusta más que el chocolate! ajajajajajaja.

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